Día Internacional de la Mujer 2024


En un mundo asediado por diversas crisis que ejercen una enorme presión sobre las comunidades, la consecución de la igualdad de género se vuelve más crucial que nunca. Garantizar los derechos de las mujeres y las niñas en todas las esferas de la vida es fundamental para asegurar un desarrollo sostenible.

Uno de los principales obstáculos para alcanzar la igualdad de género para el año 2030 es la preocupante falta de financiamiento, con un déficit anual abrumador de 360.000 millones de dólares destinados a medidas para promover la igualdad de género.

Este año la conmemoración del Día Internacional de la Mujer será bajo el lema “Financiar los derechos de las mujeres: acelerar la igualdad”.

Estas son las cinco áreas que requieren un esfuerzo conjunto para evitar seguir discriminando y dejando atrás a las mujeres:

1. Financiar los derechos de las mujeres: Un tema de derechos humanos.

El tiempo apremia. La igualdad de género sigue siendo el mayor desafío en términos de derechos humanos. Invertir en políticas que promuevan la igualdad de género es imperativo desde una perspectiva de derechos humanos y es fundamental para crear sociedades inclusivas. Los avances en favor de las mujeres benefician a todas las personas en el mundo.

2. Erradicar la pobreza y la desigualdad.

Desde 2020, la pandemia de COVID-19, los conflictos geopolíticos, los desastres climáticos y las perturbaciones económicas han empujado a 75 millones más de personas hacia la pobreza extrema. Esto podría llevar a más de 342 millones de mujeres y niñas a vivir por debajo del umbral de la pobreza para el año 2030. Es crucial actuar de inmediato para evitarlo.

3. Promover un financiamiento transformador para la igualdad de género.

Según estimaciones recientes, el 75 % de los países mantendrán los recortes en el gasto público en 2025 debido a conflictos y al aumento de los precios de los combustibles y los alimentos. La austeridad afecta negativamente a las mujeres, ya que reduce el gasto público en servicios esenciales, políticas de cuidado y protección social. Las propuestas de recaudación fiscal y de incentivos con una perspectiva de género pueden ser herramientas para reducir la desigualdad y fomentar la economía real.

4. Transición hacia un desarrollo sostenible y una sociedad de cuidados.

El sistema económico actual agrava la pobreza, la desigualdad y el deterioro medioambiental, afectando de manera desproporcionada a las mujeres, especialmente aquellas que enfrentan múltiples formas de discriminación. Es crucial avanzar hacia una sociedad de cuidados que preserve el medio ambiente y la sostenibilidad de la vida. Financiar iniciativas de desarrollo local alternativo y organizaciones que abogan por la justicia económica y climática puede impulsar soluciones concretas.

5. Apoyar los feminismos y movimientos que promueven el cambio.

Las organizaciones feministas lideran la lucha contra la pobreza y la desigualdad de las mujeres en toda su diversidad. Sin embargo, enfrentan una escasez de recursos, con poco apoyo de la cooperación internacional, los fondos multilaterales, los presupuestos nacionales o la filantropía. Es urgente financiar a estas organizaciones para fortalecerlas, ya que su empoderamiento contribuye a la democracia, la paz y el desarrollo sostenible.

En este Día Internacional de la Mujer, unámonos para convertir estos desafíos en oportunidades y construir un futuro mejor.